15 de febrero de 2011

Las Marcas y las Marcas (no tan) Blancas

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El asunto de las supuestas Marcas Blancas no resulta ser mas que otro artificio mercantilista, otra triquiñuela de merchandaising.

Lo mas interesante es que es difícil saber qué información es correcta y cual es incorrecta en los listados de las marcas. Al parecer la información sobre quién-fabrica-qué no suele ser pública (en ocasiones, al menos antiguamente, se podía leer o adivinar el fabricante original por algunos datos de la etiqueta, como la dirección o los datos fiscales). Tampoco está claro quienes participan en recopilar los listados; finalmente en lo que a veces llega por correo en ocasiones ni siquiera se sabe cuándo se hizo la recopilación.

El trabajo hecho por El Replicante es en cualquier caso muy interesante, incluyendo una referencia al Buscador de Empresas Alimentarias Inscritas en la Agencia Alimentaria donde se pueden buscar empresas por Razón Social o número de registro (a mi no me ha servido de mucho para localizar una nocilla marca blanca, pero imagino que funciona).

Una vez mas la metafísica de la mercadotecnia invade el ideal de la informatización de los seres. Los listados conocidos de marcas fundamentan Máscaras cuando devienn el libre albedrio del intercambio. Lo que aquí es una marca allá es una marca blanca, y lo que es una marca blanca aquí impajaritablemente detrás lleva una reconocida enmascarada marca.

Yo elijo seguir comprando caro o barato (la mayoria de las veces no por mi voluntad) y dejo de lado mi estusiasmo por las dichosas marcas blancas que casi lo único que hacen es subir los niveles de desempleo, mostrando mas desordenados los escaparates.

Juan Jo

14 de febrero de 2011

Buscando la democracia en América Latina


En busca de la Democracia latinoamericana

En Colombia, por citar un ejemplo latinoamericano importante, el destino de las familias ha estado marcado por las masacres sobre la población civil y el secuestro, paridos de un "embarazo ideológico" de mas de 40 años y abortando victimas con la ayuda de las "parteras paramilitares", invento de un gobernante autoritario, sanguinario mas, como los de la lejana África, en un modelo de guerra interior financiado por los Estados Unidos de América para facilitarle las cosas al ejército y para-ejercito de un terrateniente ahora ex presidente llamado Álvaro Uribe Vélez. Una batalla socio económica que durante más de media centuria se sigue manteniendo a golpe de libre comercio internacional, los intereses de las familias con mayor poder adquisitivo emparentadas con los gobernantes, la corrupción, el narcotráfico internacional, la narco política, el clientelismo en diferentes niveles, inseguridad de todos los tipos y crisis de valores en general. En la Colombia actual, como sucede con otros pueblos del resto del continente americano, se establece ni mas ni menos que un estado aristocrático con todas las características de la época del nacimiento de la burguesía; una clase devenida de un tradicional rango social y enfundada en la alineación de clases, casi enterrando la dignidad personal bajo el yugo de la violencia y el dinero.

Los colombianos que viven en el exterior siguen exponiendo invariablemente que su país está mejorando, y seguramente se equivocan; coadyuvados por las noticias internacionales que emiten esas mismas familias adineradas y perseverantemente ambiciosas en sus programas informativos; noticias que se retransmiten por agentes noticiosos sin ninguna profundidad, análisis ni contraste, que manejan datos manipulados indiscriminadamente en su fuente.

Juan Jo