Al contrario de dejar de ser la ciudad salsera que siempre ha sido, ahora con sus bailarines y orquestas de salsa, se reafirma. La salsa como música no ha podido ser desplazada por otros ritmos musicales que han ido ganando fuerza y participación entre la gente, sobre todo por la juventud en las discotecas de tendencias rítmicas más modernas, y las emisoras.
Por tanto la salsa en Cali sigue vigente y se expande con más fuerza aun en las otras regiones del país y hacia países circunvecinos.
"Cali sigue siendo sinónimo de Salsa, rumba y alegría"
Muchas personas en la actualidad desconocen el valor cultural, social y económico que esta actividad representa para Cali, no saben todo el desarrollo y evolución que el ritmo ha tenido en la ciudad.
Empezando, Cali es reconocida mundialmente como la capital mundial de la salsa, pues grandes orquestas representativas de este género, han surgido en la ciudad, como por ejemplo “Grupo Niche”, “Fruko y sus Tesos”, "Octava Dimensión", “Son de Cali”, entre otras. Orquestas que surgieron en la ciudad, y luego brillaron en el exterior, trasladando a muchos lugares del mundo la identidad salsera de la sultana.
Muchas letras de estas canciones son una alegoría a Cali, resaltando sus atributos culturales y estéticos. Temas como “Cali Ají”, “Cali Pachanguero”, “Oiga mire vea” se convirtieron en grandes éxitos musicales, describiendo lo más bello de Cali.
En otra instancia, las numerosas academias de baile caleñas, fueron formando excelentes bailarines que con sus participaciones fueron ganado concursos cada vez más importantes en otros países, dando a conocer de esta manera a Cali ante el mundo. Las escuelas de baile fueron demostrando la existencia de este estilo de baile rápido y acrobático, denominado Cali style.
Hay que denotar que el reconocimiento mundial de Cali como capital salsera, se empezó a forjar desde años atrás, desde dos importantes plataformas para el desarrollo e impulso de la salsa en Cali, como fueron La Feria de Cali y la zona de Juanchito.
Desde 1957 arrancó la tradición de celebrar anualmente la Feria de Cali, que aunque en sus inicios fue una feria taurina, se fueron incorporando conciertos y shows de artistas, con la participación de bailarines y orquestas, para disfrutar de las época decembrina. La Feria de Cali dio pie a que importantes artistas de salsa mundiales como Héctor Lavoe, Willie Colon, Celia Cruz, entre otros muchos, fueran invitados a participar en los conciertos.
Todo esto hizo que la ciudad adquiriera una reputación a nivel mundial, como ciudad rumbera y salsera, destino obligado de los grandes cantantes y orquestas.
El sector de Juanchito, un corregimiento del municipio de Candelaria pero aledaño, a orillas del río Cauca se convertía en una importante zona para la rumba salsera, pues surgieron innumerables grilles y discotecas, gracias al movimiento salsero de Cali y la adición de los ritmos provenientes de los inmigrantes llegados de la región pacifica de Colombia.
Las mayores discotecas de Juanchito se consolidaron como íconos de la rumba y la salsa, un paso obligado de todas las grandes orquestas que visitaron el país. Importantes movimientos salseros como la institución “Fania All Stars” y a causa de la cercanía de este corregimiento con Cali, como bien lo decían en la canción del grupo “Grupo Niche”: “Del puente para allá es Juanchito, del puente para acá esta Cali”[…], significando que cuanta orquesta pasaba por Juanchito terminaba en Cali o viceversa.
Otro asunto que permite pensar en la salsa como patrimonio de Cali, aunque esta no haya nacido en la ciudad, es que el imaginario de la caleñidad contemporánea gira en torno a la salsa, de esta forma ha logrado sobrevivir tanto a las nuevas culturas de la globalización como de la inmigración. Una tradición que está asentada sobre una historia urbana vivida, una relación de profundas raíces que se generaron y crecieron con la gente y los barrios de la ciudad.
OTROS FACTORES
La expresión juvenil que en los años 70 y 80 se dio, sobre todo en otros sitios del mundo, con géneros como el rock y el jazz, pues en Cali se dio con la Salsa. Grandes artistas internacionales provenientes de New York y Puerto Rico, impulsaron el nacimiento de numerosos bailaderos e impregnaron a la juventud caleña del gusto y pasión por la salsa...
Al parecer la salsa llegó principalmente a través del ferrocarril que llegaba a los barrios Obrero y Sucre de Cali, barrios de estrato bajo que se fueron convirtiendo en puntos de recreación movidos por el baile de la salsa; es por ello que la salsa se atribuyó a los barrios de estrato bajo a las actividades delincuenciales, situaciones de inseguridad y violencia en estos barrios de “la zona de tolerancia”
En 1957, gracias a la iniciativa de periodistas como Alfonso Bonilla Aragón y Raúl Echevarría Barrientos, nace la “Feria de Cali”.
Gracias a la caseta panamericana de la Feria de Cali, el ritmo de la salsa fue legitimado como baile típico de la cudad, generando así integración entre estratos sociales y adoptándose el sentimiento de identidad por la Salsa.
La salsa no es un ritmo musical que adoptamos porque sí, de otra cultura, es considerada patrimonio cultural de la ciudad porque se desarrolló a partir de la mezcla de algunos ritmos llegados de New york, Puerto Rico y Panamá, como por ejemplo la charanga y el Boogaloo, que fueron transformados en los años 70 por los caleños, con la aceleración de las revoluciones de los LP, obteniendo un ritmo mucho más rápido y agitado; un cambio radical y la impresión de un sello propio caleño, al baile de la salsa: empezaría a presentarse el estilo rápido y acrobático de baile,
Como verán, entonces, el titulo de “capital mundial de la salsa” no se definió alegremente y sin rigor.
La salsa actualmente representa para Cali una interesante “industria económica” y producto de exportación que cada vez contribuye más al turismo y reconocimiento de la ciudad en el mundo.
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